El Gobierno provincial y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) alcanzaron un acuerdo paritario que incluye la continuidad de la actualización por el Índice de Precios al Consumidor (IPC). Se espera q sea sometido a votación de las Asambleas que se realizarán en las próximas horas.
«El acta contiene lo que vinimos a buscar. Pudimos construir otra propuesta que tiene que ver con dar una continuidad al IPC», sostuvo el secretario general del gremio, Carlos Quintriqueo, en las puertas de casa de Gobierno, y ante un grupo de delegados que estuvieron aguardando el resultado de la reunión, en la esquina de Roca y La Rioja.
El acuerdo toma como base el mes de febrero y establece aumentos cada tres meses. Es decir, el próximo aumento por IPC será percibido por los trabajadores en mayo próximo. Pero, además, ATE consiguió un bono de 150 mil pesos que se liquidará en la primera quincena de marzo. «Compensa un poco las pérdidas salariales de enero y febrero», destacó el referente gremial.
Un dato no menor: ese bono no remunerativo también se pagará a los jubilados estatales, a quienes también alcanza el acuerdo salarial de la jornada, al tiempo que se agrega otro monto de 154 mil pesos en concepto de ropa de trabajo que la Provincia pagará en abril.
Así las cosas, Quintriqueo destacó que las negociaciones entre el Gobierno y ATE sigan siendo por IPC. Incluso anticipó que es probable que similar propuesta se traslade al gremio de los docentes.
«Si bien no fijamos temporalidad, vamos a seguir negociando por IPC cada tres meses durante todo 2024», celebró el sindicalista, y agregó: «El próximo aumento acumulado se paga en mayo».
El acuerdo fue posible en el marco de una reunión que, por el lado del Ejecutivo provincial, convocó al ministro de Gobierno, Jorge Tobares, el subsecretario de Gobierno, Juan Grandi, y a la subsecretaria de Hacienda, Carola Pogliano. Por el gremio, estuvieron Quintriqueo y otros sindicalistas.
De esta manera, la mesa salarial con ATE llega a un acuerdo sin medidas de fuerza. No obstante, todavía tiene que ser puesto a consideración de las asambleas. «Por los ánimos que hay, la aprobación será abrumadora. Yo en capital anticipé que voy a mocionar la aprobación», concluyó Quintriqueo.