El intendente de Neuquén, Mariano Gaido, ha anunciado el inicio de una obra clave para mejorar el acceso a la ciudad: un estacionamiento subterráneo en la rotonda de Pirkas. Esta infraestructura, que comenzará su construcción en breve, busca aliviar el congestionado tráfico de la zona, especialmente para aquellos que ingresan desde el norte. Con una capacidad para 800 vehículos, el proyecto también incluirá un polo gastronómico y oficinas municipales, mejorando así la oferta de servicios para residentes y visitantes.
Con un plazo de ejecución de 8 meses, esta obra se enmarca dentro de un plan más amplio de 25 proyectos de infraestructura vial destinados a facilitar el acceso a Neuquén. Gaido destacó que a diario ingresan alrededor de 150 mil autos a la ciudad, y la nueva infraestructura ofrecerá una vía alternativa de entrada, a través de la conexión de Raúl Alfonsín con Jujuy y 9 de Julio. Sin embargo, el sector Este enfrenta desafíos debido a la jurisdicción nacional de los puentes carreteros, lo que limita las intervenciones locales.
El proyecto del estacionamiento subterráneo ha sido aprobado por el Concejo Deliberante, y se espera que la inversión, estimada entre 6 y 7 millones de dólares, sea recuperada por el inversor a través de la explotación comercial del espacio durante 30 años. Alejandro Nicola, secretario de Infraestructura y Planeamiento Urbano, resaltó la innovación del modelo de inversión privado, donde el inversor asume los costos operativos y eventualmente transfiere la infraestructura al municipio.
La obra no solo busca resolver la falta de estacionamiento, sino también abordar el crecimiento demográfico y la expansión urbana que experimenta Neuquén. El proyecto subraya la necesidad de soluciones creativas y sostenibles para enfrentar los retos de una ciudad en constante desarrollo. Además, algunos concejales han propuesto revisar los espacios reservados en el microcentro para maximizar la disponibilidad de aparcamiento.
Este estacionamiento subterráneo representa un paso significativo hacia la modernización de la infraestructura urbana de Neuquén, reflejando un compromiso con la mejora de la calidad de vida de sus habitantes y el fortalecimiento del tejido urbano. La esperada obra no solo aliviará el tránsito, sino que también impulsará el desarrollo económico y social en una de las zonas más dinámicas de la capital.