El Ejecutivo envió al Congreso un proyecto de ley para derogar las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y reformar el sistema de financiamiento de los partidos políticos. Sin embargo, para tratarlo, será necesario habilitar sesiones extraordinarias o esperar al inicio del próximo período legislativo, el 1 de marzo.
La propuesta también incluye modificaciones a la ley electoral, estableciendo que los partidos deberán tener personería en al menos 10 de los 24 distritos del país para obtener reconocimiento jurídico.
Negociaciones clave para avanzar
Para aprobar estas iniciativas, el oficialismo enfrentará un desafío en ambas cámaras legislativas. En Diputados necesita 129 votos, y en el Senado, 37. Con solo 39 legisladores propios en la Cámara baja y 6 en el Senado, el Gobierno deberá buscar acuerdos con otras fuerzas políticas para alcanzar el quórum necesario.
Los argumentos del Gobierno
El proyecto destaca que las PASO no cumplen con su propósito original y representan un costo innecesario para el Estado. Además, propone eliminar el financiamiento estatal para las campañas políticas y la obligatoriedad de que los medios difundan spots electorales gratuitos, promoviendo un sistema basado únicamente en aportes privados.
El Ejecutivo subrayó que esta reforma busca mejorar la calidad democrática y aliviar la carga financiera sobre los ciudadanos, criticando el uso prolongado de recursos públicos para sostener el aparato político.
Próximos pasos
Con el período ordinario de sesiones a punto de concluir, la viabilidad de estas reformas dependerá de la convocatoria a sesiones extraordinarias, en las que el oficialismo intentará avanzar en el debate parlamentario.