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Carla Lavin, una madre que el año pasado acampó durante cinco días frente a Casa de Gobierno en busca de una vivienda social para ella, su esposo y sus cinco hijos, se encuentra nuevamente sin hogar y continúa insistiendo en su solicitud al Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (IPVU).
La lucha de esta familia por una vivienda digna se remonta a varios meses atrás. Carla formaba parte de la Cooperativa MTD, pero nunca recibió la asignación de una casa. Por ello, el año pasado se vio obligada a protestar frente a Casa de Gobierno, exigiendo una solución que aún no ha llegado.
A pesar de haberle asignado un terreno en respuesta a su reclamo, Carla señala que este ya estaba adjudicado a otra familia, obligándolos a dejarlo. Posteriormente, se les asignó otro terreno en el barrio Almafuerte I, donde se estaba construyendo una vivienda por parte del IPVU. Sin embargo, según sus declaraciones, la construcción se encuentra paralizada desde octubre pasado.
Este lunes, Carla volvió a presentarse en las oficinas del IPVU, pero solo recibió la respuesta de que «no hay recursos». Desesperada, esta madre, quien trabaja en el área de Desarrollo Social, busca una solución que le permita acceder a una vivienda pagando, sin que sea un regalo, pero con la posibilidad de deducir directamente del salario.
«Ya han pasado 10 meses y nos encontramos en la misma situación. Estamos en la calle desde hace tres días y necesitamos una respuesta del gobierno. No porque haya cambiado el gobierno, las cosas tienen que dejar de cumplirse», afirmó Carla.
Mientras espera una solución, Carla está tratando de conseguir materiales para fabricar una casilla en el terreno asignado en Almafuerte I, con la esperanza de proporcionar un refugio temporal a su familia. Aunque en el área hay acceso a luz y agua, la construcción de la vivienda oficial aún requiere al menos siete meses más.
