El Hospital Provincial Neuquén realizó una intervención de disección aórtica tipo B espontánea en situación de emergencia, que requirió la colocación urgente de una endoprótesis, la única solución viable para salvar la vida del paciente. Fue la primera en la región y constituyó un nuevo hito en la atención cardiovascular en la provincia.
La disección de aorta es una afección potencialmente fatal que ocurre cuando se forma un desgarro íntimo-medial dentro de la pared de la aorta. La mayoría de las disecciones aórticas de tipo B son crónicas, pero en este caso, tenía una alta complejidad por lo que la urgencia de la intervención quirúrgica era clave.
En este procedimiento participaron los equipos multidisciplinarios de Hemodinamia, Cirugía Cardiovascular, Cardiología y Emergencias de Adultos.
El Dr. Fernando Barbosa, jefe del Servicio de Cirugía Cardiovascular, explicó que “generalmente esta patología se maneja de forma crónica, pero en este caso la urgencia nos obligó a actuar rápidamente debido a la complejidad de la situación”. Agregó que “en ese momento contamos con el soporte desde el ministerio (de Salud) y la dirección del hospital para poder avanzar en la compra de un insumo sumamente caro”.
“Fue una situación bastante delicada -recordó-, donde aterrizó el vuelo con la prótesis y a último momento y contra reloj se pudo resolver la situación”.
El profesional explicó que en estos casos es fundamental el trabajo en equipo. “Si no hay un equipo constituido, donde cada uno asume su rol y las responsabilidades que les tocan, ninguna de estas cosas podría hacerse y esto es desde la asistencia de la guardia, cardiología, hemodinamia, cirugía cardiovascular y la gestión administrativa también”.
Juan Moreno, Jefe del Servicio de Hemodinamia, relató que “lo que se hace es recubrir la aorta, donde está lesionado el vaso, para que deje de sangrar. En el caso de este paciente, para que deje de sangrar hacia el pulmón”. Remarcó que “esto se pudo hacer. Lo hicieron el Dr. Lavaggi, el Dr. Barbosa y todo el equipo, tanto de hemodinamia como cardiovascular. Se pudo resolver de manera exitosa un procedimiento que es muy complejo, de una manera rápida y donde el paciente logró salir muy estable de la sala de hemodinamia”.
La Dra. Lilian Báez, jefa de la Unidad Coronaria, trabajó junto al equipo de Cardiología liderado por el Dr. Juan Ricotto para sostener clínicamente al paciente y brindar apoyo emocional a su familia mientras se esperaba la llegada de la endoprótesis desde Buenos Aires. A su turno, Báez ponderó el trabajo del equipo cardio renal: “Fue fundamental para estabilizar al paciente en todo momento”, dijo.
Moreno también subrayó la importancia del trabajo articulado y agradeció al Dr. Lavaggi y equipo por esta cirugía tan desafiante: “Nos enorgullece esta situación en el hospital, es muy bueno para toda la sociedad neuquina”.
Barbosa informó que el servicio de Cirugía Cardiovascular cuenta con ocho especialistas entre cirujanos vasculares y cardiovasculares. Además de él, tuvieron participación activa en esta intervención Oscar Sepúlvera, Federico De Caso, Claudio Moyano y Valentín Benítez. “Hoy en día, el 99% de las patologías cardiovasculares se resuelven en el ámbito público”, añadió, agradeciendo también el apoyo de la Dirección General del hospital y del Ministerio de Salud por la gestión eficiente de los recursos necesarios para hacerlo.
“En el hospital se hacen intervenciones también al nivel abdominal, torácico, distintas patologías e incluso hemos colocado válvulas aorticas percutáneas, realizamos trasplante renal, cirugías cardiacas en su totalidad”, enumeró Barbosa al concluir que “todo el avance del hospital en este último tiempo ha sido muy grande”.