El Ejecutivo declaró a Aerolíneas Argentinas sujeta a privatización a través del Decreto 873/2024, publicado en el Boletín Oficial. Tras 16 años de gestión estatal, el Gobierno consideró que los objetivos no se cumplieron, justificando la necesidad de transferir la compañía al sector privado para mejorar su eficiencia y reducir el impacto en las finanzas públicas.
El decreto argumenta que la privatización permitirá una mejor prestación del servicio y fomentará la competencia en el sector. También critica los beneficios laborales del personal de Aerolíneas, señalando que agravan la situación financiera de la empresa.
Este movimiento ocurre en medio de conflictos con los gremios, mientras la Asamblea de Accionistas deberá resolver la designación de un nuevo Gerente de Operaciones antes del 16 de octubre.